Absolutismo 

Primeramente, el absolutismo es un sistema de gobierno que se basa en otorgar todo el poder de una nación en una sola persona, que no esta obligada a rendir cuentas al parlamento o a la sociedad. Este es una definición muy general, aunque el absolutismo fue usado más para referirse a los gobiernos europeos, siendo la mayoría de esta categoría, uno de sus mayores y primer representante fue Francia. Esta forma de gobierno fue muy usual en el siglo XIV, hasta que en el siglo XIX, el pueblo retiro esta forma de gobierno. No es lo mismo que el totalitarismo, que es el poder del Estado tomado por un partido político o militar. Fue tanto un régimen y sistema político como ideología y un periodo histórico. Algunas de sus características son las siguientes:

• Poder total: El rey estaba exentó de toda ley institucional, como el poder judicial o el parlamento, por lo que podía hacer todo lo que quisiera sin ninguna consecuencia o castigo. Además de tener el control de estas, al cambiarlos o disolverlos. 
• Rey como representación divina: En algunos gobiernos más radicales, consideraban al monarca a nivel de Dios o que el era Dios.
• El rey es el Estado: El rey era proclamado como el Estado, por lo que de el poder publico y sus leyes estaban escritos a deseo del monarca.
• Poder centralizado: Como todo el poder es residido en una persona, su palabra debe ser cumplida por todos, siendo funcionario o súbdito sin ninguna objeción.
• Otorgamiento de poder: Es bien sabido que en Europa la principal característica del absolutismo es la concentración de poder, pero este también tenía la posibilidad de otorgar poder a otra persona sobre otro territorio en nombre y para beneficio del monarca.
• Selección de seguidores: El monarca, en algunas monarquías podía escoger a las personas que formarían parte del Estado.

Un ejemplo, sería la monarquía de España, que apareció después de las monarquías de Francia e Inglaterra. Esta tiene similitudes con las características antes mencionadas, como que el gobernante solo le rinde cuantas a Dios o que existen representantes suyos en distintos territorios que mantenían el poder del rey, estas personas eran la burocracia y eran escogidas por el mismo rey. Aunque hay también diferencias. Resulta que el rey y la nobleza tenían ciertas limitaciones, y las cortes ya tenían la capacidad de frenar al rey al menos en la aplicación de leyes. Inicio con el reinado de Alfonso Raimúndez, el rey Alfonso VII de León y Castilla, el Emperador (1105-1157), y finalizo con el corto reinado de Fernando VII "El Deseado", que tomo el trono tres veces, una en la que solo duro 3 meses del 1808, y otra que duro desde 1812 y 1820, que fue cuando los liberales sacaron al rey y se quedaron con el mando, que duro tres años. Después, Fernando llega de nuevo al poder, muriendo en 1833, dando origen a un desequilibrio político, en la que a veces se reformaba y se quitaba el absolutismo.